Hoy me miraba al espejo, preparándome para iniciar el 14 de febrero, haciéndome una pregunta ¿soy o no una persona atractiva?
Siempre que hablamos de un concepto así, es importante definirlo. Aunque existen definiciones de diccionario para cada palabra, los conceptos toman significados distintos dependiendo de las experiencias que vivimos.
En mi reflexión, concluí lo que significa para mí ser una persona atractiva.
Para mí, ser una persona atractiva va mucho más allá de ser guapo/guapa, feo/fea, alto/alta, delgado/delgada. Para mí, ser una persona atractiva significa atraer cosas buenas.
Pienso en una persona atractiva como aquella persona que es capaz casi de cambiar el ambiente que se percibe en una habitación con solo entrar en ella.
Esas personas que hacen que nos sintamos cómodos y cómodas cuando hablamos o interactuamos con ellas.
Ser atractivo/atractiva, magnético/magnética, significa que cuando llega una persona nueva al grupo somos capaces de hacerla sentir incluida, parte de la conversación, bien recibida.
Las personas así, atraen cosas buenas en sus vidas. Parece como si la suerte las siguiera pero en realidad, van construyendo relaciones sólidas basadas en la confianza que permiten que, en el lugar en el que se paren, les traten bien.
¡Cuánto me gustaría ser una persona así!
Y a pesar de que sigo teniendo días bajos, días malos, días en que no quiero interactuar con nadie, ni incluir a nadie, ni contestar a nadie, soy una persona atractiva.
Pero hoy no ha sido uno de esos días ¨malos¨. Hoy me siento y me sé una persona atractiva y creo que todos lo somos en realidad, solo hace falta conectar con ello y salir a la calle sintiéndonos atractivos/atractivas.
¿Y tú, crees que eres una persona atractiva?
¿Y tú hoy, te sientes una persona atractiva?