Las bebidas energéticas están cada vez con más fuerza y variedad en nuestros mercados, todos conocemos a gente que las consume con el objetivo de estar despiertos para estudiar, o simplemente para aguantar una noche de fiesta. Lo que seguramente casi ninguno conozca son los riesgos que el consumo habitual de este tipo de bebidas conlleva para nuestra salud.
El estudio de 2013 de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria un 30% de los adultos, el 68% de los adolescentes y un 18% de los niños (quizás el dato más preocupante) consumen bebidas energéticas al menos una vez al año, además también cuenta que un 10% de jovenes y adultos ha consumido más de un litro de dichas bebidas en un solo día. A esto se añade el último infrome de la OMS (Organización Mundial de la Salud) que advierte de que el consumo abusivo de bebidas energéticas puede producir afecciones tales como hipertensión, palpitaciones, convulsiones y en rara ocasión hasta la muerte. Su principal peligro reside en los altos contenidos en cafeína y derivados (cafeína, guaraná…) que contienen estas bebidas por no hablar del azúcar, presente en todo tipo de refrescos.
Desde ¿Por Qué Comemos? Dieta Mediterránea Personalizda queremos sumarnos al sector en contra de la comercialización y consumo de este tipo de bebidas, prohibidas ya en muchos países del norte de Europa, y queremos concienciar de los riesgos reales que pueden provocarnos, ya que si queremos obtener energía natural, podemos conseguirla consumiendo alimentos naturales como pueden ser los frutos secos.
FUENTE: EL PAÍS